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La mundialmente famosa cervecería irlandesa Guinness no sólo produce la belleza oscura del mismo nombre, sino también una deliciosa Irish Red Ale.
Kilkenny se elaboraba originalmente en la ciudad irlandesa de Kilkenny. Los monjes de la Abadía de San Francisco fueron los responsables de la deliciosa Amber Ale. Hoy en día, la cerveza se elabora en la cervecería St. James Gate, parte del imperio Guinness. Ya no son los monjes los que manejan las palas de macerado, sino los cerveceros profesionales. Y en la cervecería también han sucedido muchas cosas: la cervecería St. James está considerada uno de los sistemas de elaboración de cerveza más modernos de Irlanda y vende cerveza en todo el mundo.
Y aunque los cerveceros y el proceso de elaboración han cambiado, una cosa siempre ha permanecido igual: Kilkenny se elabora según una receta probada y ha conservado su carácter irlandés y su aroma a malta. La cerveza clásica fluye en la copa con un intenso color marrón castaño y brilla magníficamente cobrizo cuando la luz incide. Una corona de espuma ligeramente teñida de poros finos corona la cerveza y te invita a tomar el primer sorbo con un aroma tentador. El sabor inicial revela un cuerpo esbelto con una sensación en boca incomparablemente cremosa. Potentes tonos de malta acarician el paladar con notas de caramelo que se derrite en la boca, nueces tostadas, dulzura afrutada, granos secados al sol y un toque de vainilla y roble.
¡La consistencia cremosa y el sabor a malta con mucho cuerpo hacen de Kilkenny un verdadero placer cervecero!
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