La Trappe Witte Trappist es la primera cerveza blanca con el raro sello trapense del mundo. Alrededor de una docena de cervecerías pueden llamar cerveza trapense a sus creaciones y deben cumplir toda una serie de reglas estrictas para recibir esta distinción. El más importante de ellos es que la cerveza debe elaborarse bajo la supervisión de monjes trapenses. En muchos casos, incluso los propios monjes elaboran la cerveza.
La Trappes White Ale es una delicada especialidad de cerveza amarilla que impresiona por su suavidad aterciopelada, su equilibrado carácter de malta y su fina acidez. La carbonatación picante confiere a la cerveza una elegancia y ligereza especiales: miles de pequeñas perlas dejan que los aromas bailen en la lengua y hacen de la Witte Trappist un placer cervecero refrescante. La obra aromática de los monjes tiene muchos seguidores en los Países Bajos y ya ha recibido allí varios premios prestigiosos. Ahora esta deliciosa cerveza está conquistando los países de habla alemana y saciando también aquí la intensa sed de cerveza.
Esta cerveza de color rubio claro muestra una ligera turbidez en la copa y está adornada con una corona estable de espuma blanca como la nieve. Los aromas de malta de trigo ligeramente tostada, lúpulo floral, cítricos ácidos, melocotón, albaricoque, pimienta blanca y clavo recorren como un hilo conductor el aroma y el sabor y hacen de La Trappes Witte Trappist una auténtica delicia culinaria.
Agua, malta de cebada , malta de trigo , jarabe de glucosa, lúpulo y levadura.