La Altenmünster Urig Würzig se presenta en la copa con un rico tono ámbar dorado, coronada por una espuma cremosa de poros finos. La espuma es estable y firme. En nariz, se despliega, revelando una armoniosa combinación de malta ligeramente tostada y frutos secos tostados, un toque de toffee y un toque de flores de verano recién cortadas. Una suave flor de lúpulo completa la primera impresión olfativa y abre el apetito. En boca, la cerveza es corpulenta y equilibrada: el dulzor aterciopelado de la malta se envuelve en un fino amargor de lúpulo ligeramente terroso, que aporta profundidad y estructura a los aromas. Un cuerpo suave y redondo garantiza una agradable sensación en boca, mientras que el final seco y ligeramente picante invita a beber otra botella.
Con su aroma intenso y su equilibrado dulzor y amargor, la Altenmünster Urig Würzig es un acompañamiento versátil. Marida a la perfección con aperitivos contundentes, pan fresco de granja y queso picante de montaña, y también realza el sabor de carnes a la parrilla o asados. Además, le da un toque sabroso a una sopa cremosa o un guiso sustancioso.
El Altenmünster Urig Würzig es siempre una buena elección y es un delicioso capricho con o sin acompañamiento culinario.
Agua, malta de cebada , lúpulo, extracto de lúpulo.