El equipo de Riedenburger Brauhaus siente fascinación por los cereales: como maestros cerveceros, sienten una afinidad natural por la cebada, pero otros cereales menos comunes en la sala de cocción también merecen su atención. Entre estos cereales se incluyen variedades antiguas y casi olvidadas, como la escanda, el mijo y el escanda. Este artículo se centrará en este último, ya que este cereal de la familia del trigo es la estrella de la histórica cerveza escanda de Riedenburger.
El escanda se cultivaba en Oriente Medio hace ya 10.000 años. Esta planta se caracteriza por su crecimiento robusto y su resistencia a las enfermedades, lo que da lugar a un grano rico en minerales que se utilizaba en la antigüedad no solo para hornear, sino también para elaborar cerveza. Poco a poco, el trigo, menos complejo, sustituyó al escanda en panaderías y cervecerías, pero este antiguo grano se está redescubriendo actualmente.
La Riedenburger Brauhaus elabora dos cervezas diferentes: una versión con alcohol y otra sin alcohol de su histórica cerveza Emmer. Ambas son orgánicas y contienen una base de malta compuesta de emmer, cebada y espelta, lo que le da a la cerveza un cuerpo voluminoso. Pero eso no es todo: la exquisita mezcla de granos evoca intensas notas de pan recién horneado, toques de caramelo derretido, aroma a frutos secos tostados y un fuerte toque especiado. Un toque afrutado de lúpulo completa con maestría la delicia de la malta.
Agua, malta escanda*, malta de cebada*, malta de espelta*, lúpulo*, levadura*
* de agricultura ecológica
Valores nutricionales por 100g
Valor calórico: 21 kcal / 82 kJ
Carbohidratos: 4,2 g
de los cuales azúcares: 4,2 g
Ácidos grasos: < 0,1 g
de los cuales ácidos grasos saturados: < 0,1 g
Proteínas: 0,5 g
Sal: < 0,1 g