El buen Mönchsambacher de la cervecería Zehndner es una auténtica leyenda en la zona de Bamberg. Todo el mundo conoce y ama esta cerveza sencilla, con su sabor inconfundible y su carácter honesto y redondo. Pero el Mönchsambacher ya no sólo se bebe en la ciudad catedralicia, sino que su buena reputación le precedió y le dio popularidad internacional.
No es de extrañar, porque apenas conocemos una cerveza tan equilibrada y bebible como esta excelente de Franconia.
La Mönchsambach Lager se presenta en la copa con un maravilloso y natural color amarillo turbio y soleado y en su cabeza tiene una majestuosa espuma blanca como la nieve. Un fuerte aroma a pan recién horneado, lúpulos herbales y malta tostada te tienta a tomar el primer sorbo. Esto revela una cerveza con mucho cuerpo, una textura fina y suave y un gran equilibrio entre lúpulo y malta. Este último llega primero al paladar y deleita las papilas gustativas con una composición de caramelo cremoso, cereales dulces y abundante pan de masa madre. Los lúpulos se unen y aportan una paleta maravillosamente jugosa de las notas más finas que se extienden desde la hierba recién cortada hasta las hierbas especiadas y un toque de pradera de flores de verano. Un marcado amargor pone la guinda al pastel y completa a la perfección la equilibrada experiencia gustativa. El final es perfecto y deleita con un amargor limpio y un dulzor perfectamente equilibrado.
Absolutamente exitoso.
Agua, malta de cebada , lúpulo, levadura.