La sede de la cervecería del castillo Sandersdorf es muy especial: situado en el distrito de Eichstätt, el castillo Sandersdorf se encuentra en el corazón del Altmühltal. Densos bosques rodean el pueblo, suaves colinas con exuberantes prados verdes se alternan con frondosos campos atravesados por pequeños arroyos, formaciones rocosas y laderas cultivadas. El variado paisaje está salpicado de antiguos castillos y palacios, ruinas históricas y pueblos pintorescos, y en cada rincón se puede disfrutar de la cocina sencilla de la región y de una cerveza fresca y recién tirada. Un lugar popular para visitar es la cervecería del castillo de Sandersdorf, que ofrece deliciosas cervezas elaboradas con materias primas orgánicas.
Antes de que los actuales propietarios tomaran el control de la cervecería, los barones de Bassus dirigían la empresa. En aquel entonces, la excelente cerveza se elaboraba directamente en el castillo, hasta que por cuestiones de espacio hubo que buscar un nuevo lugar. La planta cervecera fue reubicada y reconstruida en la sombreada ladera norte, frente al castillo. En este contexto también se crearon las bodegas de piedra, que hasta el día de hoy enfrían la cerveza de forma fiable y refinan el sabor. Bajo el liderazgo de la nobleza, la cervecería floreció y se hizo conocida más allá de las fronteras de Alemania. En 1995, los Barons se separaron de su cervecería y los propietarios cambiaron varias veces hasta que finalmente Leonhard Salleck y Jacob Horsch tomaron las riendas. En el castillo de Sandersdorf continúan la rica tradición cervecera y combinan las ventajas de su tierra natal, rica en materias primas, con el arte de elaborar cerveza de nueve generaciones de artesanos cerveceros.
Para dar el toque final a sus cervezas y cumplir con su responsabilidad hacia el planeta, el equipo de Schlossbrauerei decidió en 2010 seguir las estrictas normas de Bioland. Sólo las empresas que se comprometan a utilizar materias primas procedentes de agricultura ecológica controlada y que además cumplan los requisitos para un procesamiento suave y sostenible de los ingredientes podrán llevar el sello ecológico. La razón por la que la cervecería decidió dar este paso es obvia: el paisaje circundante no sólo proporciona paz y fuerza, sino que también produce todo lo necesario para elaborar una buena cerveza. A cambio de este rico regalo, por supuesto, la familia cervecera Sandersdorf protege la naturaleza de su tierra natal y devuelve algo. El proceso de elaboración de cerveza está diseñado para ser lo más orgánico y natural posible. Esto incluye, por ejemplo, el enfriamiento de las cervezas en la propia bodega de roca de la cervecería, que se mantiene a una temperatura constante durante todo el año sin necesidad de electricidad. Para aquellas zonas donde la electricidad es esencial, se utiliza energía procedente de recursos renovables. La cervecería también planta árboles para fomentar las abejas y los insectos y trabaja de manera eficiente gracias a la tecnología cervecera más moderna.
¡Dale a tu conciencia un sorbo de cerveza fresco con las creaciones de la cervecería del castillo Sandersdorf!