Durante siglos, la familia principesca Oettingen-Wallerstein ha demostrado un gusto exquisito en todos los aspectos de la vida, desde el arte y la arquitectura hasta la gastronomía. Este refinado sentido de la calidad también se refleja en las creaciones cerveceras de su cervecería tradicional. La Fürst Wallerstein Brauhaus, una de las últimas cervecerías aristocráticas que quedan en Alemania, representa el arte cervecero más elevado y el auténtico disfrute. Un ejemplo perfecto de su maestría cervecera es el Fürst Wallerstein Hell.
Esta clásica pale ale se presenta en un dorado radiante en la copa, mostrando su frescura sin filtrar con una turbidez fina y uniforme. Está coronada por una espuma blanca y estable que completa elegantemente su aspecto y huele deliciosamente. En nariz, se despliegan suaves notas de malta, con toques de miel y pan fresco. Una sutil flor de lúpulo completa armoniosamente la primera impresión olfativa.
En boca, la Fürst Wallerstein Hell ofrece un equilibrio exquisito: suave, fácil de beber y fresca. El delicado dulzor de la miel y el robusto grano se equilibran con un delicado y discreto amargor del lúpulo, mientras que el trub de la cerveza aporta un agradable toque picante. La suave y agradable carbonatación y el cuerpo delicadamente equilibrado la convierten en una cerveza suntuosa, ideal tanto para ocasiones festivas como para veladas relajadas. Una delicia real con un carácter sencillo.
Agua, malta de cebada , lúpulo.