Bamberg se encuentra en el corazón de la región con la mayor densidad de cervecerías del mundo. El mapa de Franconia está lleno de cervecerías tradicionales, cervecerías locales privadas y cervecerías jóvenes. Casi ningún otro lugar de nuestro planeta está tan loco por la cerveza y en ningún otro lugar se puede encontrar una selección tan fantástica de creaciones artesanales. Hay una gran variedad de estilos de cerveza típicos de Franconia y muchas cervecerías también enriquecen su oferta con cerveza artesanal moderna. El jugo de cebada es una parte vibrante de la cultura local y se celebra todos los días. La ciudad de Bamberg cuenta actualmente con poco más de una docena de cervecerías y una de ellas es Mahrs Bräu. Esta tradicional empresa es una auténtica institución en el patrimonio cultural mundial y desde hace mucho tiempo es un destino popular para los residentes de Bamberg y sus visitantes.
Los orígenes de la cervecería se remontan al año 1670. Entonces se fundó la cervecería y se menciona por primera vez en los documentos. La cervecería cayó en manos de la familia Michel en 1895. Ellos compraron la granja en el distrito de Wunderburg de Bamberg y la cervecería asociada con una bodega de piedra en Stephansberg. Menos de diez años después, el chef Johann emprende una renovación inmediata y construye un nuevo edificio de ladrillo. Finalmente, sus descendientes dieron a la cervecería el nombre de Mahrs Bräu e introdujeron conceptos sostenibles en el negocio. Una mayor modernización y tecnología garantizan que la cervecería esté actualizada y produzca lo más respetuosamente posible con el medio ambiente. La cervecería ha recibido premios por su compromiso con la naturaleza y sus cervezas también han atraído la atención internacional. La selección de clásicos de Franconia recibe prestigiosas medallas en concursos y hace que la cervecería sea conocida mucho más allá de las fronteras de Bamberg y su país de origen.
Como una de las últimas cervecerías tradicionales de Bamberg, Mahrs Bräu tiene una gran responsabilidad: la familia tiende un puente entre la artesanía tradicional de sus antepasados y los gustos contemporáneos de los conocedores de cerveza modernos. Cuatro generaciones de Michels han liderado la suerte de la cervecería hasta el día de hoy y llevan el legado de sus predecesores con orgullo y pasión. Cada cerveza que sale de la cervecería privada tiene carácter y sabor. De ello se encarga un equipo de maestros cerveceros profesionales que combinan la artesanía cervecera con ideas frescas, tecnología de última generación y una pizca de curiosidad. Para proteger y preservar su tierra natal, la cervecería apoya numerosos proyectos y utiliza electricidad verde. Mahrs Bräu, por ejemplo, forma parte del movimiento Slow Food y es socio de Beefuture, una organización que apoya a la población de abejas en Alemania y Europa. La familia Michel gestiona con gran éxito el equilibrio entre tradición y presente.