El lugar donde se encuentra solía ser un factor económico importante. Sólo podías elaborar cerveza si estabas ubicado cerca de agua dulce y tenías granjeros disponibles para suministrarte granos y lúpulo. Las largas rutas de transporte no eran antes un inconveniente, sino más bien un criterio de eliminación. Hoy en día, por supuesto, las cosas son completamente diferentes: los cerveceros obtienen el agua directamente del grifo o de un pozo profundo y, si es necesario, la adaptan a sus necesidades mediante un tratamiento químico; las materias primas provienen de todo el mundo. Nos envían lúpulo de otros continentes y la malta puede venir de la finca de al lado, de Inglaterra, Bélgica o América. Aprovechamos una riqueza de posibilidades sin precedentes y el planeta entero es nuestro proveedor. Es aún más sorprendente cuando la gente se decide en contra de esta abundancia.
Una de estas personas es Jan Kemker, que se centra en la región que le rodea. Jan viene de Münster y durante sus vacaciones en Europa conoció y amó el arte tradicional de la elaboración de cerveza. Le gusta especialmente la artesanía cervecera belga. Después de estudiar economía agrícola y alimentaria, este inspirado nativo de Münster alquiló una cocina y empezó a elaborar cerveza. Innumerables experimentos y una gran variedad de materias primas de su tierra natal fueron su campo de juego y pronto desarrolló una gama con la que podía recibir comentarios de los expertos en las ferias de Europa. Con su idea de revivir el histórico arte cervecero de Münster, su atención al detalle y sus cervezas únicas, captó la atención de la escena. Jan se inspira en su trabajo en piezas cerveceras medievales y recetas centenarias de su región y las trae al presente con dedicación, mimo e ingredientes exquisitos. A pesar de todo su amor por el concepto, el cervecero nunca olvida la alegría y el disfrute: ¡la cerveza es para beber!
Hoy en día, un dúo dinámico dirige la cervecería Kemker Kultuur: Jan dirige junto con su socia Nicole un establo reconvertido en cervecería en la finca Schulze Wettendorf. Su gama se compone de creaciones incomparables elaboradas con materias primas orgánicas, hierbas y flores cuidadosamente seleccionadas, cepas de levadura silvestres o cultivadas en casa y frutas locales. Algunas de las cervezas se elaboran en exquisitos barriles de madera procedentes de Francia y, finalmente, todas se embotellan en elegantes botellas de champán. Especialidades como la famosa cerveza Aolt representan el histórico arte cervecero de Westfalia y traen un pedazo vivo de historia a su vaso de cerveza. Jan y su equipo nos enseñan el fino arte de la elaboración de cerveza tradicional y nos brindan cervezas informativas, bebibles y deliciosas.
Brauerei Jan Kemker
Wettendorf 1
8351 Everswinkel - Alverskirchen
Deutschland 
